Entrevista MAX VON SYDOW

Aprovechando la presencia del actor MAX VON SYDOW en el Festival de Sitges 2016, tengo la oportunidad de asistir a la rueda de prensa y repasar su extensa carrera.

¿Qué papel recuerdas con más cariño?

Es una pregunta difícil de responder, pues he tenido muy buenos personajes, son muchos los films de los que guardo grandes recuerdos, pero si he de escoger uno me quedo con Pelle, el conquistador, no solo por el personaje que interpreté sino también por la historia, una historia acerca de la intención de devolver la dignidad a la gente trabajadora.

¿Has reflexionado sobre la influencia que has tenido en la historia del cine fantástico?

La verdad no soy el más adecuado para hablar sobre ello, presumo con humildad de haber trabajado en películas como EL EXORCISTA, que ha llegado a un gran público, teniendo efecto en mucha gente, mientras las películas con Bergman, han marcado mi vida, he amado sus historias y los personajes que creo, tanto en cine como en teatro.

Para mí es más satisfactorio el trabajo en el teatro, pues el trabajo en el cine es más un trabajo de directores, es quien controla todo el proceso, el actor puede estar 2 semanas trabajando y después no tienen ningún tipo de control sobre el resultado final, en el trabajo es todo lo contrario es un trabajo en equipo, es una experiencia mucho más intensa, como actor el impacto que tiene mucho más impacto sobre mi propia persona, también depende de con quién y cómo , pero normalmente los directores de cine no tienen tanto tiempo para trabajar contigo.

En Suecia los teatros son municipales, así que contrataban a un equipo para toda la temporada, lo que hace el ayuntamiento era contratar a un gestor director, en este caso Bergman, quien contrataba a todo el equipo gestor, en verano cuando acababa la temporada con ese mismo equipo hacía películas, por eso mi experiencia personal con Bergman fue tan importante no solo a nivel profesional sino también humano, por ello soy muy feliz

¿El cine Americano le ha decepcionado en el fondo y en la forma, a un actor tan curtido como usted?

Los buenos directores nunca decepcionan, muchas veces hay directores que no inspiran a los actores y entonces hay que arreglárselas, es en esos momentos debes revisar mucho el guión, el material una y otra vez, es muy importante que los actores tengan tiempo para reunirse y trabajar juntos, antes de ponerse delante de la cámara, aunque muchas veces no hay tiempo para ello.

¿qué diferencias había en la técnica de dirección de Bergman cuando trabajaban en teatro o en cine?

La verdad no había mucha diferencia, a él le gustaba mucho trabajar con los actores, era muy cercano y su técnica era muy parecida en ambos medios, el sistema de trabajo era básicamente igual para teatro que para cine, el tenía mucho sentido del humor, un humor muy enigmático y sorprendente, tenía una sonrisa muy peculiar, era una experiencia tan compleja como enriquecedora, pues han trabajado juntos durante muchos años.

Tras acabar de trabajar con Bergman empezaste a trabajar de aquí para allá, como si fuese el sueco errante ¿qué cambio en su vida para tomar esa decisión?

Por diversas razones decidí trasladarme a Francia, convirtiéndome en ciudadano francés, mi última interpretación en Suecia fue en Estocolmo en 1995, a veces conoces a alguien especial, quieres pasar tiempo con ella, te enamoras, te casas, me siento muy feliz y agradecido por haber hecho esto, Francia me fascina, con una historia muy interesante, está cercano a lugares que me gustan como España, Italia, durante muchos años estuve un poco malcriado, pues tuve la suerte de trabajar con grandes directores, estaba muy bien acostumbrado, cuando Bergman ya no estuvo decidí marcharme.

Usted tiene una secuencia memorable "Una partida de ajedrez con la muerte", una partida que como se puede ver va ganando ¿Como fue grabarla?

Fue mi primera película con Bergman, para un actor joven trabajar con Bergman era una experiencia muy importante, se basaba en una obra de teatro escrita por el propio Bergman, no era una obra teatral más bien una línea de actores que iban recitando monólogos sobre diferentes problemas y vivencias, yo mismo la vi en teatro y quede impactado, cuando me llamaron para llevarla al cine, su personaje era un soldado que volvia de Jerusalem donde le habina cortado la lengua y no tenía diálogo, a pesar de tyodo estaba encantado de formar parte de la película aunque no pudiera hablar su personaje, finalmente Bergman cambió de opinión y escribió diálogos para mi personaje, la película se rodó en un paraje precioso del sur de Suecia, a las orillas del mar Báltico, la compañía productora era la más importante por aquel entonces en Suecia, aunque en un principio fue difícil conseguir la financiación, pues lo productores les parecía una obra más bien experimental, como Bergman tuvo un gran éxito con "sonrisas en una noche de verano", gracias a ello los productores invirtieron a pesar que les pidieron tener un presupuesto muy reducido, por fin se hizo y nunca pensaron que fuera a ser una película tan importante e influyente en la historia del cine y me siento muy feliz de haber formado parte de ella.

Hace unos 30 años dirigió una película como Kadinka, pero nunca más volvió a dirigir ¿Quisiera saber por qué?.

Kadinka vino porque leí el libro de un escritor Danés y me enamoré de la historia, hablé de llo con varios directores incluso con Bergman pero a ninguno les interesó la historia, el tiempo pasó y finalmente conocí a un inversor danés comentándole que era una pena que la historia no se llevase a las pantallas, entonces este inversor me comentó ¿porqué no la haces tú?, porque ni soy director ni tengo dinero para hacerla, me comentó que él podía financiarla, pero debes hacerla tú, como finalmente parecía ser esta la única opción hice la película y pude trasladarla a la pantalla, pero  yo no soy director, soy un actor, para ser director hace falta tener un talento muy especial, es un trabajo muy laborioso, complicado y necesitas mucho tiempo, por eso no lo volví a hacer, aunque yo lo disfruté mucho.